Empiezan las clases y todos estamos alborotados. Los niños porque no ven la hora de comenzar, y los padres porque noven la hora de que los niños empiecen el ciclo lectivo para que les baje la ansiedad y el nerviosismo. Pero no todo el escenario pre-inicio escolar es un caos. Para nada. Por ejemplo, una de las buenas noticias que el inicio de clases trae consigo es que casi 100.000 alumnos catalanes estudiarán con libros digitales en el próximo curso escolar.
Esta cifra representa casi la mitad de los alumnos que estudian en las secundarias de Cataluña, que en total son casi 240.000 jóvenes. La idea es ofrecerles a los estudiantes una nueva realidad de estudio, para que puedan cambiar su forma de trabajar y su relación con el maestro, con el fin de que cambien favorablemente. Además, lo novedoso de este anuncio es que el año pasado, solo 45.000 alumnos optaron por libros digitales, lo que quiere decir que la cifra se ha duplicado para este año.
Para quienes aún no están al tanto de esta gran iniciativa, los libros digitales presentan un coste mucho menor a los de formato en papel. Algunos, cuestan entre 20 y 30 euros, valor muy favorable al bolsillo dada la realidad económica que se vive actualmente. De esta manera, mientras que el gasto en materia de libros el año pasado fue de 25 millones de euros, este año se registran un valor que no llega a los 4 millones, de los cuales 2.700.000 han sido brindados por la Generalitat.
Sin dudas que el cambio es enorme. Vale recordar que un lote de habitual de libros costaba entre 250 y 300 euros, mientras que de esta nueva manera no sobrepasa los 100 euros. Además, se logra que los chicos estén inmersos en este proceso de digitalización que vive el mundo.
