Se dió a conocer a nivel mundal con Las benévolas y ahora vuelve a llamar la atención del público mundial con Lo seco y lo húmedo. Hablamos de Jonathan Littell, el escritor franco- estadounidense que ha sorprendido a crítica y público por su capacidad para diseccionar aquellos aspectos de la mente humana, de la irracionalidad y la insensatez de la que a veces somos capaces los seres humanos; sin dejarse llevar por el tipismo o por el recurso a la emotividad.
Tras hablar del Holocausto, Littell se adentra en Lo seco y lo humedo en otra de las cuestiones más espinosas de la historia y la mente humana: el nazismo y, por extensión, la mentalidad de los radicales. Lo hace a través de la figura del general de las SS León Degrelle (general nazi que fue condenado a muerte por su país por luchar con Hitler y se refugió en la España franquista donde vivió en libertad hasta su muerte, en 1994), una figura que ya le sirvió para crear al protagonista de su primera obra, que , por cierto, es posterior a esta en el tiempo. A través de las cartas escritas por el general y de los discursos que empleó para dirigirse al enemigo, Littell compone un ensayo que no deja indiferente.
Preguntas como ¿puede un hombre que se define como normal convertirse en un fascista? O ¿qué pasa con el terrorismo suicida islámico, con el combatiente Tamil o con el combatiente checheno con el genocidio de Ruanda, con los cortadores de brazos de Sierra Leona?, son aquellas a las que Littell trata ahora de buscar respuesta en esta obra que promete volver a dejarnos con la boca abierta y la mente inquieta.
